domingo, 23 de mayo de 2010

pentecostés 2010

Nuestro aliento, un soplo al mundo de hoy
Soplar es una acción casi cotidiana en nuestra vida.
Soplamos para enfriar algo que nos quema, o cuando hace frío soplamos entre nuestras manos para darnos calor , soplamos al apagar las velas en los cumpleaños, soplamos cuando estamos cansados para aliviarnos, soplamos para apartar las cosas muy pequeñitas, soplamos al jugar…….
 
En nosotros el Espíritu sopla cuando nos renueva cada año, cada día, cada minuto, hace que ese viento, esa palabra,  ese aliento …  ese Ruah, sea soplo de vida para nosotros y para los demás.
El Don que recibimos no es para ser guardado , sino que debe convertirse en aliento, en viento que salga convertido en aliento de vida
Soplo, Viento, Vida, Cambio, Aliento…  Espíritu Santo
Nuestros deseos de ser aliento para los demás necesitan hacerse realidad. Soplemos y dejemos que lleguen a los otros como un deseo, como una fuerza, como algo que nos empuja.
Feliz Pentecostés
Feliz presencia del Espíritu